El pasado 27 de julio, la revista Environmental Science and Technology publicó en su web el estudio Emissions from Electronic Cigarettes: Key Parameters Affecting the Release of Harmful Chemicals, de Sleiman et al.
Entre las conclusiones principales del estudio destaca que claramente, los cigarrillos al calentarse los solventes de la mayoría de líquidos, emiten sustancias químicas nocivas (irritantes o carcinógenos) que varían en función de temperatura, usos, etc. del dispositivo electrónico.
Uno de los autores, H. Destaillats, indica que "Los defensores de los cigarrillos electrónicos afirman que las emisiones son mucho más bajas que las de los cigarrillos convencionales, así que es mejor usar cigarrillos electrónicos. Diría que eso podría ser verdad para ciertos usuarios, como los que fuman desde hace mucho y no pueden dejar de hacerlo, pero el problema es que eso no significa que sean saludables. Los cigarrillos regulares son muy nocivos. Los cigarrillos electrónicos son solo nocivos".
Como hemos comentado en otros posts de Aragón sin humo, los cigarrillos electrónicos introducen sustancias de efectos desconocidos (como los saborizantes); aún desconocemos sus efectos a largo plazo; elevan los niveles de cotinina en la sangre de algunos fumadores pasivos... En resumen, su utilización tiene evidentes riesgos para la salud pública y este último estudio viene a demostrar la emisión de carcinógenos e irritantes.