Los objetivos específicos de la Encuesta eran:
- Conocer el patrón de consumo de tabaco antes y durante el confinamiento.
- Estudiar los cambios en los patrones de consumo (frecuencia y/o cantidad) antes y durante el confinamiento.
- Analizar los intentos de abandono del consumo (intentos, resultado y motivos por los que no se ha conseguido).
- Conocer la percepción de salud de las personas encuestadas.
- Conocer la percepción de riesgo del consumo de tabaco y cigarrillos electrónicos.
- Conocer la exposición al humo de tabaco en no fumadores y la exposición de fumadores a los miembros de su hogar.
Contestaron la encuesta 24.386 personas, 8.789 hombres, 15.510 mujeres y 87
intersexuales.
Entre las conclusiones del estudio, destacamos que:
- Durante el confinamiento por COVID-19 aumentan las cantidades consumidas, en todos los productos analizados, en todas las edades y en ambos sexos.
- El nivel de dependencia al tabaco casi se triplica durante el confinamiento, fundamentalmente a causa del estrés, pasando de un 3,9% de los fumadores de antes del confinamiento a un 9,3% de los fumadores durante el confinamiento.
- El riesgo percibido de contraer infección por coronavirus y desarrollar síntomas más graves, es mayor para el consumo de tabaco que para el de los cigarrillos electrónicos. El 80,7% de las personas encuestadas son conscientes del riesgo que conlleva consumir tabaco, presentando los fumadores una percepción de riesgo mayor que los no fumadores.
Se puede acceder al Informe completo de resultados en la web del Ministerio de Sanidad, a través de este enlace.
